Las parteras brindan atención reproductiva, incluyendo la interrupción del embarazo (TOP) después de las 12 semanas, debido a su enfoque centrado en la mujer. Sin embargo, el TOP tardío puede causarles angustia significativa por sus complejidades médicas, sociales y emocionales. Una revisión de investigaciones de 2000 a 2021 identificó 24 estudios relevantes, resaltando tres temas: aspectos positivos, aspectos negativos y la necesidad de apoyo para las parteras. Aunque las parteras informaron satisfacción laboral al cuidar mujeres durante TOP tardío y desarrollaron nuevas habilidades, también enfrentaron desafíos emocionales y falta de preparación.